- Mamá, mamá, en el colegio me dicen despistado.

- Anda, hijo, no les hagas caso y vete a tu casa.

 

 

- Mamá, mamá, en el colegio me dicen cabezón.

- ¿Y por qué no les pegas?

- Es que se meten por las calles estrechas.

 

 

- Mamá, mamá, en el colegio me dicen cabezón otra vez.

- Anda, hijo, no les hagas caso y vete a darle sombra al pueblo, que hace mucho calor.

 

 

- Mamá, mamá, en el colegio me dicen mafioso.

- Bueno, hijo, yo me encargo del asunto.

- Vale, pero que parezca un accidente.

 

 

- Mamá, mamá, en el colegio me dicen feo. Pero mírame cuando te hablo.

 

 

- Mamá, mamá, en el colegio me dicen loco.

- ¿Y eso por qué, hijo?

- ¡¡¡Y YO QUÉ SÉ!!! ¡¡¡AAAARRRGH!!!

 

 

- Mamá, mamá, en el colegio me dicen despistado.

- Su tabaco, gracias.

 

 

- Mamá, mamá, en el colegio me dicen cruel.

- Anda, hijo, no les hagas caso y deja de tirar el gato por la ventana.

 

 

- Mamá, mamá, en el colegio me dicen que tengo los dientes muy grandes.

- Anda, hijo, no les hagas caso y deja de arañarme el suelo.

 

 

- Mamá, mamá, en el colegio me dicen tonto.

- ¿Y a mí qué?

- A ti, pe, u, te, a.

 

 

- Mamá, mamá, en el colegio me dicen guarro.

- Anda, hijo, no les hagas caso y deja de sonarte la nariz en la cortina.

 

 

- Mamá, mamá, en el colegio me dicen psicópata.

- Anda, hijo, no les hagas caso y deja de darle collejas a tu abuela, que está mala.

 

 

- Mamá, mamá, en el colegio me dicen pasota.

- ¿Y eso por qué, hijo?

- Ni lo sé, ni me importa.

 

 

- Mamá, mamá, en el colegio me dicen orejón.

- Anda, hijo, no les hagas caso y deja de moverte que me estás dejando caer los papeles.

 

 

- Mamá, mamá, en el colegio me dicen saborío.

- ¿Y eso por qué, hijo?

- ¿Tú eres tonta? ¿Te lo tengo que explicar todo?

 

 

- Mamá, mamá, en el colegio me dicen que no tengo amigos.

- Habla con ellos del tema, hijo.

- Yo no hablo con nadie.

 

 

- Mamá, mamá, en el colegio me dicen que repito mucho las cosas.

- Mamá, mamá, en el colegio me dicen que repito mucho las cosas.

- Mamá, mamá, en el colegio me dicen que repito mucho las cosas.

 

 

- Mamá, mamá, en el colegio me dicen que tengo cara de caballo.

- ¿Quién te dice eso, hijo?

- ¡ HIIIIJOS DE P…!

 

 

- Mamá, mamá, en el colegio me dicen que siempre llego tarde. Mamá, despierta.

 

 

- Mamá, mamá, en el colegio me dicen fin de semana.

- Anda, Domingo, no les hagas caso.

 

 

- Mamá, mamá, en el colegio me dicen detective.

- ¿Y eso por qué, hijo?

- Cállate, aquí las preguntas las hago yo.

 

 

- Mamá, mamá, en el colegio me dicen champú.

- Tranquilo, Johnson, no más lágrimas.

 

 

- Mamá, mamá, en el colegio me tiran galletitas y migas de pan.

- Anda, Paloma, no les hagas caso.

 

 

- Mamá, mamá, en el colegio me dicen Lady Gaga.

- ¿Quién te dice eso, hija?

- Alejandro, Ale, Alejandro.

 

 

- Mamá, mamá, en el colegio me dicen pato.

- ¿Y eso por qué, hijo?

- Cua, cua, cualquiera sabe.

 

 

- Mamá, mamá, en el colegio me dicen loco.

- ¿Quién te dice eso, hijo?

- Las ardillas, mamá, las ardillas.

 

 

- Mamá, mamá, en el colegio todos me dejan solo. ¡Mamá, mamá!

 

 

- Mamá, mamá, en el colegio me dicen que tengo la boca muy grande.

- Anda, hijo, no les hagas caso y tráete la pala que te voy a dar el jarabe.

 

 

- Mamá, mamá, en el colegio me dicen Rambo.

- Mañana voy al colegio a hablar con tu tutor.

- No, mamá, esta es mi guerra.

 

 

- Mamá, mamá, en el colegio me dicen mentiroso.

- Anda, hijo, si tú ya no vas al cole.

 

 

- Mamá, mamá, en el colegio me dicen deforme, mal hecho.

- Anda, hijo, no les hagas caso, cierra los tres ojos y duérmete.

 

 

- Mamá, mamá, en el colegio me dicen mal hecho.

- ¿Y tú que les dices, hijo?

- Levanto el brazo y les digo: ¡A que te meo!

 

 

- Mamá, mamá, en el colegio me dicen Backstreet Boy

- ¿Quién te dice eso, hijo?

- Everybooooody.

 

 

- Mamá, mamá, en el colegio me dicen Windows 95.

- Anda, hijo, no les hagas caso y haz algo útil.

 

 

- Mamá, mamá, en el colegio me dicen cebolla.

- Anda, hijo, no les hagas caso y vete que me vas a hacer llorar.

 

 

- Mamá, mamá, en el colegio me dicen peludo.

- Pepe, el perro me está hablando.

 

 

- Mamá, mamá, en el colegio me dicen mariquita.

- ¿Y por qué no les pegas, hijo?

- Es que son tan guapos.

 

 

- Mamá, mamá, en el colegio me dicen antipático.

- ¿El qué?

- ¡NO REPITO!

 

 

- Mamá, mamá, en el colegio me dicen alfajor.

- Anda, Jimena, no les hagas caso.

 

 

- Mamá, mamá, en el colegio me dicen que papá es un cabrito.

- Anda, hijo, no les hagas caso y papá no es tan joven.

 

 

- Mamá, mamá, en el colegio me dicen largo.

- Anda, hijo, no les hagas caso y deja de estropearme los dinteles de las puertas.

 

 

- Mamá, mamá, en el colegio me dicen explotador.

- Anda, hijo, no les hagas caso y ahora te lavo la ropa, te la plancho y te la cuelgo en tu ropero después de hacerte el desayuno.

 

 

- Mamá, mamá, en el colegio me dicen impaciente. Dime por qué, dímelo, dímelo, dímelo ya.

 

 

- Mamá, mamá, en el colegio me dicen enano.

- Anda, hijo, no les hagas caso y deja de salir por la puerta del gato.

 

 

- Mamá, mamá, en el colegio me dicen radical.

- ¿Y tú qué les dices?

- ¡HIJOS DE P…! (Plas, plas, plas, plas) ¡HIJOS DE P…!

 

 

- Mamá, mamá, en el colegio me dicen comunista.

- Anda, hijo, no les hagas caso y devuélveles las gomas a tus compañeros.

 

 

- Mamá, mamá, en el colegio me dicen argentino.

- ¿Y tú qué les dices?

- Che, pibe, ¿qué decís vos?

 

 

- Mamá, mamá, en el colegio me dicen bruto.

- Anda, hijo, no les hagas caso y deja de abrir las nueces con los dientes.

 

 

- Mamá, mamá, en el colegio me dicen que me como mucho el coco.

- ¿Y eso por qué, hijo?

- No estoy seguro pero postulo la hipótesis de que el nivel existencial de mis contertulios del aula discrepa mucho del fenotipo adquirido por vías subyacentes.

 

 

- Mamá, mamá, en el colegio me dicen que practico la sinceridad brutal.

- ¿Sí? ¿Y eso por qué, hijo?

- No, lo sé, ni me importa. Además, yo no te quiero porque tú no eres mi madre y estás muy gorda.

 

 

- Mamá, mamá, en el colegio me dicen fantástico.

- ¿Y eso por qué, hijo?

- No lo sé, pero intuyo que mi nivel de midiclorianos es anormalmente alto, que fui secuestrado por una nave klingon y que hablo perfectamente el élfico.

 

 

- Mamá, mamá, en el colegio me dicen agresivo.

- ¿Y eso por qué, hijo?

- Como me vuelvas a hacer otra preguntita te parto la cara.